Disminución visual y educación física

En las actividades de educación física, hay ciertos aspectos visuales que se ponen en juego, a la hora del rendimiento o la eficiencia.

En las actividades gimnásticas:
El disminuido visual tiene una limitación en la capacidad de imita, esto puede disminuir la efectividad de un ejercicio gimnástico.
Puede salvarse con la intervención docente de educación física y/o maestra integradora, con la atención individualizada y guía manual de los movimientos a realizar: la maestra ayuda con sus manos a realizar el movimiento de flexiones para hacer bicicleta.
El temor a caerse, golpearse, etc. producido por el no ver bien puede limitar las actividades físicas de los niños, por lo cual, en algunos casos, suelen ser torpes al correr, saltar o trepar. El maestro deberá tomarlo de la mano y acompañarlo para darle seguridad.

Estas operaciones no son absolutas. Dependerán de la motivación, la estimulación, el grado de socialización y las condiciones psicomotrices.

En el deporte:
Para el deporte es importante poseer una óptima percepción del espacio y de los relieves, ya que permite valorar la separación entre jugadores o la distancia respecto a un obstáculo. Esta evaluación es más lenta e imprecisa cuando la visión está disminuida o cuando solo se ve de un ojo (visión monocular). Un deportista en estas condiciones tendrá más errores y reaccionará más tarde.
Un buen campo visual es también importante. El rendimiento del jugador será mejor cuanto más abarque su visión. Es, en los deportes colectivos, donde esta integridad del campo visual se hace más necesaria.
El disminuido visual es más afecto al deslumbramiento solar, además de fatigarse con mayor frecuencia, debido a que deberá poner mayor atención y superar mayores dificultades durante el juego.


Para tener en cuenta:

Si se toma la actividad deportiva en forma lúdica, el alumno podrá participar, rendirá menos debido a su minusvalía, cometerá fallos y dependerá más de sus compañeros. Si se toma de manera competitiva, el problema es mayor, pues los errores en estos casos (en que la finalidad es el mayor rendimiento deportivo posible) van en detrimento del resultado buscado por el deportista o el equipo.