TEGUCIGALPA.- El espíritu indomable que la acompañó desde niña, evitó que la tragedia la abatiera y hoy por hoy dirige un proyecto que es pionero en Honduras y quizás en el resto de Centroamérica. La ingeniera industrial, Denia Ramos, era una profesional con muchas ilusiones, pero no se quedó a rumiar su desgracia, cuando en los Estados Unidos, después de una intervención quirúrgica hace unos doce años le diagnosticaron una extraña e incurable enfermedad que causa baja visión, conocida como “retinosis pigmentaria”. En un principio, con ayuda de sus parientes y amigos trató de rebatir esa realidad y por ello viajó a Cuba, donde por fortuna fue operada por el mismo científico que descubrió el mal. Le recuperó la vista en forma parcial-de día ve un poco y en la noche, su capacidad visual se reduce notablemente. Está consciente que el proceso degenerativo es inevitable, pero eso no la arredra. Después de mucho batallar decidió no ser carga de la sociedad. No sólo eso. Se dispuso además romper los moldes y tabúes e incursionó en el agradable arte-para quienes lo reciben- de brindar masajes al estilo japonés hasta convertirse en toda una profesional. Desde hace dos años dirige la clínica AMMA la cual ha sido fuente de empleo también para siete ciegos totales, hombres y mujeres y tres personas de baja visión, incluida ella misma. Fuentes de trabajo Esta idea nació con la iniciativa de abrir nuevas fuentes de trabajo a las personas con discapacidad visual y mejorar su calidad de vida, narró en la sala de su clínica, localizada en la capitalina colonia Tepeyac, calle Yoro, cuadra abajo del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep). Las clínicas de masaje son necesarias para las personas de todas las edades, si desean prolongar más su existencia, aseguran los expertos en el arte. | “Ha sido muy difícil para nosotros el poder encontrar esa apertura en la micro, pequeña y gran empresa local”, confesó, tras destacar el apoyo recibido por parte del gobierno de Japón por impulsar las carreras técnicas en beneficio de los ciegos. Además hace ocho meses se incorporó al proyecto el Servicio Alemán de Cooperación Social-Técnica (DED) el que brinda apoyo financiero. Amma, como se llama la clínica, es una ancestral técnica japonesa que data desde hace tres mil años, dirigida a combatir las enfermedades propias de los músculos, tendones y el estrés. Las sesiones duran unas dos horas y no es preciso despojar de la ropa- si la persona así lo desea- para aplicarle los masajes. Los diez discapacitados no necesitan los ojos para “mirar”, en este caso, palpar, si algo anda mal en el cuello, columna o espalda de la persona que tienen entre manos y detectar otras dolamas que tanto aquejan al ciudadano atrapado en este mundo globalizado y altamente competitivo. 20 nacionalidades Han atendido clientes de unas 20 nacionalidades distintas y los más asiduos son los diplomáticos de las embajadas europeas radicadas en la capital, sabedores de los beneficios proporcionados por las técnicas orientales. Lejos de satanizar las clínicas de masaje como ha ocurrido ultimamente en el país, los extranjeros acuden a las mismas y salen satisfechos de las dos horas de terapia brindada por las manos de estos ciudadanos que jamás se dejaron avasallar por sus limitaciones. “Hasta ahora hemos sido totalmente excluidos por la sociedad, pero queremos dejar bien en claro que en muchas ocasiones las limitaciones únicamente son mentales”, puntualizó. La entusiasta mujer de empresa hizo un llamado a todos los compatriotas que como ella sufren de ceguera total o parcial a no dejarse doblegar por el infortunio. “Esta clínica es para ustedes pues la mendicidad no es una condición de un hijo de Dios”, exclamó la joven dama, luego de instarlos a salir de sus propias casas y arrebatar las oportunidades de triunfo, las cuales no son propiedad exclusiva de algunos sectores. A pesar de funcionar a inmediaciones de las oficinas del Cohep, la clínica está lejos del apoyo de ese gremio de empresarios. “Sólo les pedimos que abran los ojos y se den cuenta de lo que somos capaces cuando se nos presenta una oportunidad. Reclamamos un trato de igual a igual no limosnas”, finalizó.
Diez empleados, siete ciegos y tres con baja visión, se desempeñan con mucho acierto en la clínica.
Técnicas Amma Reflexología Facial con acupuntura Masaje relajante Masaje deportivo
La clínica Amma es única n su especie en Honduras y opera desde unos dos años, con la cooperación del Japón y Alemania. | La ancestral técnica Amma desde hace unos tres mil años proporciona disfrute y relajamiento a los japonés y desde hace dos, está en la capital. |
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario